Reflexión
03.11.2019 11:39
El prepotente se cree que lo sabe todo.
El inculto no aprendió nada.
El imbécil, es un inculto prepotente.
El egocéntrico, se cree el centro del mundo.
El poderoso quiere siempre más poder.
El inepto sueña con el poder para ser un egocéntrico.
El humilde no presume de nada.
El honrado no tiene avaricia.
El Santo reconoce sus pecados.
El intransigente no es humilde, presume de honrado y se
cree un santo.
El sensato pasa de todos los anteriores y le llaman tonto.
Mon Cho Chen.