Lo mismo

Siempre es lo mismo. Hoy después de casi 55 años, e vuelto a ver a muchachos y muchachas haciendo lo mismo que yo hice cuando era pequeño. Nada raro ni mucho menos escepcional, solamente tonto. Es el hecho de poner monedas o chapas en los railes del tren y esperar a que pase para que las aplaste. Una estupidez que no tiene sentido alguno y que pensé que solo era juegos de niños de antaño que no tenían juguetes y que se divertían como podían, paras luego jugar a las chapas, con los metale sdeformados, o a otro juego cualquiera que la imaginación infantil tuviera a bien. Los de hoy, los que vi en la Estación de tren de Baños de Molgas, donde está mi museo , eran de entre 14 y 16 años, de los que tienen el móvil, como arma y como medio de comunicación. Nunca pensé que recurrieran en la tarde de un sábado a estas cosas que parecen de otro tiempo o de otras épocas de pobreza monetaria, pero esque en verdad hemos avanzado poco y sigue siendo mejor una caja de cartón para los infinitos juegos que propone la imaginación infantil, que los jugietes más avanzados y de técnica sofisticada. ¡Siempre lo mismo! Hay veces que estas cosas te dan pena, pero te hacen pensar en como el ser humano aprende poco y muchas veces mal.