El inepto
Si te atreves a decirle
al inepto , que lo es,
tú lo pagarás después,
porque al estar rodeado,
de lameculos amables,
pagados y alimentados,
dirán que lo has insultado,
y él como es un inepto,
lo dará por aclarado.
Ríe el rey con el bufón,
pues sabe que le habla claro,
y entre risas reconoce,
que bién se lo ha explicado.
Más cuando se es inepto,
y el bufón no está a su lado,
hace caso a otros ineptos,
a los que tiene pagados,
que le adulan con engaños.
No es cuestión de ideología,
pues el inepto aplaudido,
vive en cualquier partido,
cual si fuera en una orgía.
Bien pagado, alimentado,
con amante o con querida,
y chupando de las ubres,
de una patria repartida,
por ineptos día a día.