Amigos...
Amigos que pocos quedan,
cuando la vida da palos,
y sientes los desengaños,
de aquellos a quien más diste.
Tuercen la cara al despiste,
sabiendo que son deudores,
de dinero y sinsabores,
y parece que no existes.
Más descubro sin querer,
que a los que menos di,
son los que cuidan de mi,
por simple gusto y placer.
Cuando salga de este pozo,
¡Que juro que si saldré!
jamás yo me olvidaré,
del amigo y del tramposo.
Del que traiciona, el baboso,
la lagarta y el reptil,
el de palmada en la espalda
y de puñalada vil.
¡Amigos que pocos quedan!
más no me he de preocupar,
hay "muros" muy transparentes,
y otros que hay que saltar.
Payaso de nariz roja
y alma de saltimbanqui ,
¡No te rindas! ¡Adelante!
le haces falta a los demás.
Que la risa sabe a gloria,
cuando se supo llorar.
Moncho Borrajo. 18-5-2016